Y aunque tú no lo sepas nos decíamos tanto con las manos tan llenas, cada día más flacos. Inventamos mareas, tripulábamos barcos, encendía con besos el mar de tus labios…
Estaba escuchando esa canción del gran Quique González y me ha dado por pensar en lo maravilloso que es cuando encuentras a esa persona que te complementa a la perfección, que te entiende y se hace poco a poco parte de ti.
Es genial cuando sientes que alguien te va ganando poquito a poco y vas teniendo la certeza de que, por suerte o por desgracia, esa persona especial ha entrado en tu vida y siempre se quedará en tu corazón.
La verdad es que es duro ver como personas que se van, que salen de tu vida sin ningún remordimiento se niegan a salir de tu corazón…O quizá seamos nosotros los que les impidamos salir también de ahí, y eso es lo peor; ese sentimiento de querer aferrarte a alguien que ya no está, que posible o seguramente nunca vuelva a estar y que sin embargo siempre esté en u corazón.
Pero dejemos lo malo… ¿Y mientras esa persona está en tu vida? Cuando esa persona te acompaña en tu día a día haciendo tu vida mucho más sencilla, más completa, más divertida, en definitiva, MÁS FELIZ…
Esos momentos son los que jamás olvidarás y por los que si algún día se va impedirás que desaparezca también de tu interior, intentaras aprender de todo lo pasado pero te negarás a olvidarlo como si nada.
Y mientras tanto te sientes flotar, sientes que todo tiene un sentido especial a su lado, te levantas cada mañana con una sonrisa por poder compartir tus momentos con alguien tan afín a ti y estas deseando que llegue el momento de poder hablar con esa persona… Sabes que tu día habrá sido perfecto si has podido compartir risas, confidencias, anécdotas e incluso las chorradas más extremas pero con él o ella.
En fin, todo pasa pero hoy me ha tocado el día sentimental y de pensar en gente que se ha ido y me gustaría que aún estuviese en mi vida, que me acompañase en el camino aunque fuese de una forma distinta a como lo hizo en el pasado, pero que estuviese…
Esto es ley de vida…Después de todo, somos seres sociales ;)
Y ahora a continuar escuchando a Quique y disfrutar de su encantadora voz...
Un besito a todos y comentaros que me he cambiado el nombre porque robarle uno a un personaje literario no me parecía del todo bien así que este que sepáis que es la fusión del coche que me encantaría poder conducir algún día y de la palabra que llevo tatuada.